Hola amigos,
Por aquí me tenéis de nuevo después de muuuuuuchoooo tiempo. Debo pediros disculpas por este medio abandono, pero desde el mes de junio empezaron a surgirme miles de compromisos ineludibles que me han mantenido ocupada hasta ahora.
Es cierto que durante todo este tiempo no he dejado de hornear. Sí amigos, incluso en pleno verano he tenido las fuerzas suficientes para luchar contra el calor y encender mi horno en más de una ocasión, así que tengo muchas recetas que compartir con vosotros y sobre todo, lo que más me apetece es volver a retomar el contacto.
Para mi vuelta tenía muy claro cual iba a ser la primera receta que compartiría con vosotros, de entre todas las que he ido recopilando durante mi ausencia de más de dos meses, no podía ser otra que mis adorados "Rollos de Canela".
Y es que debo reconocer ante todos vosotros que sí amigos, soy adicta a los rollos de canela, me encantan y cada vez que tengo ocasión me deleito con uno bien calentito acompañado de mi té preferido.
Por eso y porque a mi chico le pasa lo mismo que a mí, me puse manos a la obra en pleno mes de julio e hice esta receta rápida, sencilla y lo más importante, deliciosa.
Cuando empecé con el blog publiqué otra receta de rollos de canela, pero como me gustan tanto quiero ir probando diferentes recetas hasta dar con la "receta perfecta". Además, como los hice en casa de mi chico y allí no tengo mi amada KitchenAid, necesitaba una receta en la que el amasado no fuera parte importante, ya que a mano resulta mucho más laborioso y claro, en vacaciones....trabajar....lo justo jejejeje.
Así que lo dicho amigos, si queréis disfrutar de unos deliciosos rollos de canela de lo más sencillitos y buenos a rabiar, aquí tenéis mi receta, no os defraudará.
INGREDIENTES PARA LA MASA:
- 300 ml . de leche entera.
- 550 grs de harina.
- 150 grs de harina de fuerza.
- 30 grs de levadura fresca de panadería.
- 85 grs de mantequilla a temperatura ambiente.
- Una pizca de sal.
- 1 cucharadita de vainilla en pasta.
- 85 grs de azúcar blanca.
- 1 huevo.
INGREDIENTES PARA EL RELLENO:
- 150 grs de azúcar moreno.
- 35 grs de harina.
- 120 grs de mantequilla fría cortada en pequeños cubos.
- 2 cucharadas generosas de canela.
INGREDIENTES PARA EL GLASEADO:
- 100 grs de azúcar glas.
- 4 cucharadas de leche entera o nata líquida.
- Un chorrito de agua.
PREPARACIÓN DE LA MASA:
En un cazo ponemos la leche entera a calentar y cuando este calentita, sin romper a hervir, retiramos del fuego y deshacemos la levadura fresca en la leche la tibia. Reservamos.
En un bol, ponemos los dos tipos de harina, junto con la pizca de sal, el azúcar, la mantequilla, el extracto de vainilla y la mezcla de la leche con la levadura y empezamos a amasar todos los ingredientes durante 5 minutos.
Cuando los ingredientes bien integrados, añadimos el huevo y continuamos amasando durante 5 minutos más. Si vemos que la masa se nos pega mucho a las manos podemos echar un poco más de harina hasta que veamos que se nos despega facilmente.
Engrasamos un bol con un poco de mantequilla y metemos nuestra masa en forma de bola, cubrimos con un film transparente o con un gorro de ducha ;), yo tengo un par reservado para estas ocasiones y va genial, y dejamos reposar durante 1 hora en un lugar cálido, hasta que doble su volumen.
Transcurrido este tiempo, cogemos nuestra masa, enharinamos la encimera de la cocina o cualquier otra superficie lisa y estiramos nuestra masa hasta formar más o menos un rectángulo, cuando lo tengamos listo. Reservamos.
PREPARACIÓN DEL RELLENO:
Mezclamos todos los ingredientes con un par de cuchillos, hasta que la mezcla parezcan migas.
A continuación, repartimos nuestro rellenos por toda superficie de la masa que tenemos extendida sobre nuestra encimera en el centro del rectángulo y con ayuda de una espátula la esparciremos bien pero sin llegar a los bordes.
Ahora, empezamos a enrollar la masa hasta tener un rollo gigante. Con un cuchillo de sierra vamos cortando rodajas de unos 4 cm de grosor.
Conforme vamos cortándolos, vamos colocándolos sobre una bandeja previamente engrasada con un poco de mantequilla con el fin de evitar que se nos peguen, es importante dejar una pequeña separación entre cada rodaja, ya que luego se terminarán de pegar entre sí.
Cuando los tengamos todos listos en la bandeja, los dejaremos reposar durante más o menos 1 hora en un lugar cálido, cubierto nuevamente con film transparente.
Pasado este tiempo, introducimos nuestros rollos en el horno,previamente precalentado, a 200ºC durante más o menos 15 minutos, los sacaremos del horno cuando veamos que empiezan a tener un color doradito.
PREPARACIÓN DEL GLASEADO:
Mezclamos todos los ingredientes hasta que tengamos un glaseado homogéneo y lo echamos sobre los rollos de canela antes de servir.
A mí me gusta hacer un poco más de glaseado y poner una jarra al lado de los rollos para que cada uno se sirva a su gusto, la verdad es que con más glaseado están más buenos.
Y como siempre os digo que una imagen vale más que mil palabras, me despido de vosotros hasta la próxima semana con una foto de esta delicia. ¿Quién quiere uno?
Un beso fuerte a todos amigos.
Isabel.
No hay comentarios:
Publicar un comentario