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Cheesecake de Ferrero Rocher

jueves, 24 de marzo de 2016


Aprovechando que es fiesta, hoy os traigo una receta ideal para celebrar el día. 
En casa nunca faltan las torrijas en estas fechas, de hecho en la cocina tenemos un par de bandejas que no paran de provocar continuamente, pero tenía ganas de preparar un postre diferente y por supuesto con chocolate.

En esta receta combino los postres e ingredientes que más me gustan del mundo mundial: cheesecake, crema de chocolate y avellanas y mis bombones preferidos, los "Ferreros Rocher".

Con estos ingredientes era imposible que saliera mal, ¿verdad? Pues acerté de lleno jejeje.

El resultado es una Cheesecake ligera, suave, dulce y sabrosa. No queda nada empalagosa, lo cual es de agradecer, ya que las tartas de queso, por mucho que me gusten, se caracterizan en su mayoría por esto.

Y una cosa más que la hace especial, es que no necesita horno. Lo tiene todo: sencilla, rápida y sin horno. Ideal para preparar en poco tiempo y para sorprender a tus invitados de la manera más dulce posible.


INGREDIENTES PARA LA BASE:

  • 230 grs de cookies con pepitas de chocolate y avellanas.
  • 50 grs de avellanas trituradas.
  • 100 grs de mantequilla derretida.

INGREDIENTES PARA EL RELLENO:

  • 6 láminas de gelatina o 1 sobre de gelatina neutra.
  • 300 grs de queso crema.
  • 250 grs de queso ricotta.
  • 200 grs de crema chocolate y avellanas.
  • 250 ml de nata.
  • 100 grs de chocolate negro troceado.
  • 10 bombones Ferrero Rocher.

INGREDIENTES PARA LA COBERTURA:

  • 50 grs de chocolate negro fundido.
  • Avellanas trituradas.
  • 6 bombones Ferrero Rocher.

ELABORACIÓN:

Preparamos un molde redondo desmontable con papel de hornear en la base. Reservamos.

Comenzamos preparando la base de la tarta. Para ello, trituramos las galletas con el procesador de alimentos hasta que obtengamos migas finas. Ponemos las migas en un bol, añadimos las avellanas trituradas y la mantequilla y mezclamos bien.

Ponemos la mezcla de galletas y mantequilla en la base del molde que teníamos preparado, presionando firmemente con una cuchara para que quede lo más igualado posible. Reservamos en la nevera.

Para el relleno, comenzamos remojamos las hojas de gelatina hasta que se ablanden.

En un cuenco grande, batimos el queso crema, el queso ricotta y la crema de chocolate y avellanas hasta obtener una mezcla ligera y cremosa.

Ponemos la nata a calentar al baño María para entibiarla un poco. Escurrimos las láminas de gelatina y las incorporamos a la nata tibia, removiendo bien hasta que se disuelvan. Agregamos el chocolate troceado y removemos bien hasta que éste se funda por completo.

Con cuidado, incorporamos la crema de chocolate a la mezcla de queso, pasándola por un tamiz o colador para retirar los posibles grumos de la gelatina. Batimos hasta obtener una mezcla suave y ligeramente espesa. A continuación, agregamos los bombones Ferrero Rocher troceados.

Vertemos la mezcla en el molde sobre la base de galletas y la introducimos en la nevera durante unas 4 horas como mínimo o toda la noche, hasta que cuaje.

En el momento de servir, desmoldamos y espolvoreamos las avellanas trituradas sobre la superficie de la tarta, también, esparcimos el chocolate fundido (con la ayuda de una manga pastelera provista de una boquilla pequeña) haciendo líneas finas sobre las avellanas. Colocamos seis pegotitos de crema de chocolate alrededor del borde de la tarta, para pegar cada Ferrero Rocher en cada uno ellos.

Conservamos la tarta en el frigorífico hasta el momento de servir.

Así da gusto celebrar un día de fiesta, aunque con un postre como éste cualquier día se convierte en una fiesta, hasta los lunes se ven de otra manera jejejeje. Si es que el chocolate me hace más que feliz y si es en forma de tarta y con bombones a tope.......¡Ay, no puedo pedir más!

Disfrutad mucho de estos días de fiesta y a reponer las pilas a tope, que la vuelta a la realidad promete.

Un beso fuerte a todos, mil gracias por leerme.


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